Call of Duty: Vanguard | Reseña

Activision y Sledgehammer Games presentan una nueva entrega en la famosa saga de Call of Duty con Vanguard, una entrega que llega acompañada de una campaña irregular, entre momentos realmente espectaculares y misiones más simples, un sólido multijugador plagado de mapas a elegir, y un modo de zombies que esperemos, reciba nuevo contenido próximamente.

LO MEJOR DE LO MEJOR

Creo que de entrada lo que más les puede llamar la atención, sean fans o no de la saga CoD, es que Call of Duty: Vanguard maneja un apartado técnico bastante espectacular (jugamos en Xbox Series X|S), con texturas de muy buena definición, efectos de luz y colores muy realistas, modelados llenos de gran detalle, una muy épica banda sonora y efectos de sonido contundentes y una serie de escenas cinemáticas que en ciertos momentos llegan a parecer escenas live action. Así de llamativo es en presentación Call of Duty: Vanguard al menos en esta nueva generación, por lo que si desean tener un juego de disparos y temática de WWII para presumir, sin duda quedarán satisfechos.

UNA ENTRETENIDA CAMPAÑA

Otro de los puntos a destacar es que Call of Duty: Vanguard también cuenta con un modo de historia, una campaña que dependiendo del nivel de dificultad elegido, puede llegar a durar de unas 5 a más horas; básicamente el modo les puede durar un fin de semana si le dedican sus buenas horas, aunque hay varios momentos donde en dificultades elevadas, las cosas se pueden poner muy, muy difíciles.

Y ya que estamos hablando de dificultad, la mala noticia es que esta llega por cuánta salud puede tener el enemigo, o cuántos disparos podemos recibir, pues la IA normalmente hace los mismos movimientos haciendo que repetir misiones se vuelva un poco rutinario y sin mucha sorpresa; con esto también hay que recalcar que las misiones y mapas son totalmente lineales, se trata de llegar de punto A a punto B, o simplemente resistir en un lugar hasta que llegue el apoyo. Esto no quiere decir que el juego en este modo sea malo, simplemente que no esperen algo de mundo abierto o amplios escenarios para lograr cumplir objetivos de diferentes maneras.

En Call of Duty: Vanguard la cosa es simple en este sentido, y toda la espectacularidad de la campaña se basa en “cuántas explosiones hayan en pantalla”, pues los mejores momentos son cuando el caos es absoluto y sin importar si deben resistir, o llegar a un objetivo en otro lado, toda la puesta en escena es muy intensa y ciertamente entretenida por esto, pero a final de cuentas se siente como un enorme show cinemático. Ya depende de qué busque el jugador, pero de que hay buenos momentos en campaña, los hay.

Ahora, como en todo juego (o al menos en mi experiencia) hay ciertas misiones que son muy buenas, y otras no tanto, pasando por las que podrían ser dispensables. Aunque cada misión pone su granito de arena narrativamente hablando, algunas son muy buenas, como las que entregan momentos de sigilo con sniper, o donde deben sobrevivir a ataques, derribar aviones o cruzar desiertos, pero otras se sienten más lentas; irónicamente una de estas es la Batalla de Midway, en la cual debemos pilotar un avión de combate para luchar contra los japoneses en el Pacífico, dicho evento en el juego y como todo el título en general, muestra un apartado gráfico sobresaliente, pero en jugabilidad es pesado e inexacto, y se siente más como un paseo que a ciertos minutos (si es que no los derriban) la misión sigue con una nueva sección, que es bombardear un portaaviones japonés. En general esta misión brinda de mucho espectáculo pero se queda en sólo lo visual y es más como una montaña rusa que termina luego de unos minutos dejando una impresión de haber tenido algo más extenso; incluso más adelante uno piensa que existe la oportunidad de volver a pilotar para cumplir un objetivo, pero en esta ocasión todo se representa como cinemática, dejando con ganas de más o de al menos el haber tenido más libertad para estas misiones.

A nivel narrativo y construcción de personajes no se puede pedir mucho, la cosa va simple con cada historia a lo largo de las misiones, que por cierto funcionan como flashbacks, dejando un par de misiones en el día actual de los personajes. Sin entrar en spoilers, cada personaje tiene su propio escenario y es así que se van explorando diferentes momentos de la WWII. Son una sucesión de recuerdos que si bien sirven para presentar una historia, no son tan extensos para crear gran empatía con los protagonistas de la historia. Claro, a mi parecer el juego se enfoca en la acción, como una película de gran presupuesto de Hollywood, y aunque hay ciertos momentos de carga dramática, estos son muy fugaces y todo está enfocado en lo visual y frenético, con imágenes llamativas y mucho sonido.

MULTIJUGADOR

Ya mencionada la campaña y su enfoque en “lo explosivo” y en su acierto en misiones de gran intensidad, así como en el inmenso apartado técnico, tanto sonoro como gráfico, Call of Duty: Vanguard contiene un modo multijugador que por fortuna, está lleno de mapas, todos muy variados en diferentes escenarios del mundo y todos bien diseñados, pues dan pie a diferentes oportunidades de combate, desde puntos ideales para los campers, hasta de acción muy rápida, lugares que los jugadores han encontrado muy rápidamente, aunque las partidas también se pueden jugar con bots de inteligencia a elegir.

Dicho esto Call of Duty: Vanguard tiene una gran variedad de mapas y diferentes entre si, en los cuales seguramente encontrarán sus favoritos dependiendo de su estilo de juego. El ritmo en general se siente muy rápido, la variedad de armas también, al igual que en campaña, es bastante extensa, aunque todas se manejan de una forma inclinada a la rapidez, es decir, pocas presentan dificultad para apuntar debido al retroceso; no importa el calibre, es más imprescindible percatarse en el tiempo de recarga, que en la fuerza de retroceso, dejando un poco de lado el aspecto táctico. Claro que este detalle puede ser del gusto o no de cada quien.

Como es habitual se cuenta con diferentes 12 nuevos operadores con sus propias características de armamento (que se puede personalizar) y funciones; también cuentan con desafíos particulares, lo cual hace más divertida cada partida en sus varios modos: Team Deathmatch, Domination, Search and Destroy, Free for All, Kill Confirmed y lo nuevo “Patrol”. Asimismo se destacan los tres “Ritmos de Combate” a elegir dependiendo de la aproximación que deseen a la partida (más táctico o más intenso), pudiendo elegir entre la cantidad de jugadores en enfrentamiento con Tactical, Assault y Blitz, el que entrega más caos. Todos estos elementos en conjunto se pueden combinar en sus modos de juego, así que hay muchas opciones para elegir o encontrar su partida perfecta, en pocas palabras el multijugador de Vanguard es bastante completo y ciertamente empareja o equilibra el valor junto a la campaña… dejando al último el mal sabor del modo zombies.

ZOMBIES

La oveja negra de la familia es sin duda por el momento, Zombies, ése modo tan famoso de la franquicia que sin duda ya tiene su buena base de fans y más enfocado a partidas de objetivos con los siempre populares muertos vivientes y muchos elementos sobrenaturales.

La mala noticia es que al momento de esta reseña Zombies cuenta con un mapa llamado “Der Fang”, donde 4 jugadores, o en solitario, deben viajar por portales desde un mapa base, para completar un objetivo (defender, recolectar) mientras luchan contra hordas de come cerebros; al final de cada encuentro automáticamente regresan al mapa principal, donde también aparecen zombies, y pueden mejorar armas u obtener bonificaciones, para luego ir a otro portal, cumplir su misión y así sucesivamente. Dicho esto claramente Zombies no es el mejor apartado de Vanguard por su forma monótona de presentarse, mencionando también su escaso contenido de escenario, así que rápidamente se estarán saliendo para entrar en Multijugador, o intentar alguna misión de campaña. Así que veremos si en los próximos meses recibimos actualizaciones, sobre todo en este apartado que por el momento se mira algo desolado.

A LO SEGURO

Call of Duty: Vanguard ciertamente se siente como un CoD, desde su temática, apartados, nivel técnico y campaña, es una entrega que va muy a la segura, quizá algo bueno, o algo malo, dependiendo de lo que busque cada quien. Aunque claro está, dejando de lado el buen multijugador y el feo modo Zombies, la campaña a pesar de ser muy espectacular en varios momentos, narrativamente hablando siempre deja un sentimiento de que algo nos ha faltado, puede que más misiones en el presente de los protagonistas, o más misiones donde los podamos conocer mejor, lo que es seguro, las cinemáticas bien podrían ser lo mejor de este apartado por lo bien creadas que están.

Al final, Call of Duty: Vanguard ciertamente tiene las bases para un buen futuro, por un lado una campaña sólida, aunque no perfecta, un buen multijugador lleno de contenido para su comunidad y finalmente, un modo Zombies que esperemos obtenga nuevas sorpresas a futuro.

Call of Duty: Vanguard bien podría ser un 3.5 de 5 estrellas, pero las cosas que hace bien, hace olvidar lo feo, lo que nos queda a deber, y más bien da esperanzas al futuro de esta entrega y con miras a una mejor futura entrega, por lo que un 4 justito es mi nota final.

Call of Duty: Vanguard ya está disponible en Xbox Series X|S, PlayStation 5, Xbox One, PlayStation 4 y PC.

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