Tres juegos alemanes desarrollados y producidos por Daedalic Entertainment, una forma diferente de jugar.
Quizá no para un público acostumbrado a las consolas, se trata de una serie de videojuegos point and click que funcionan por medio de la resolución de acertijos a través del seguimiento de pistas en objetos y diálogos con los personajes.
Titulados Escape, Chaos y Goodbye Deponia, Daedalic Entertainment deja una trilogía que destaca por su calidad en diseños y humor, detalles bien equilibrados que gracias a una variada paleta de colores y un estilo comic se presentan diversos lugares en los que transcurre la historia; naves, ciudades en el aire, depósitos de basura, cuevas, minas, mercados, pueblos, prisiones, drenajes y más, toman escenario para llevar al jugador por tres juegos en los que conoceremos a Rufus, un joven aventurero bastante despistado, con la mejor de las intenciones pero también egocéntrico y muchas veces egoísta, algo que lo meterá en problemas más de una vez así como a quien lo acompañe, como la accidentada androide Goal, una chica que a escapado de las garras de un villano gracias a Rufus, pero que luego ha caído en desgracia al perder la memoria.
En su camino además conocerán a otros personajes que les brindarán socorro en determinados momentos; pero la trilogía Deponia no solo es de “rescatar a la damisela en peligro” también nuestro protagonista buscará de una otra forma salvar su mundo, la tierra de Deponia, un planeta prácticamente sumido en la pobreza, donde los adinerados los ven de lejos, o mejor dicho, desde las alturas, en una ciudad llena de lujos, hogar de Bailiff Argus, el hombre que desea la destrucción de la tierra de Rufus.
Una historia que bien podría ser dramática, más bien toca los elementos de la comedia en todo instante, diálogos muy bien escritos toman las riendas de la narrativa con chistes sarcásticos y líneas caricaturizadas que hacen ver de excelente manera la relación que tienen cada uno de los personajes con Rufus (sobre todo) y entre ellos; sin duda en cada una de las tres partes hay más de una escena destacable, refiriéndome a esto y en lo personal siendo las más llamativas una que involucra varios cameos de la marca Nintendo y otra que convierte toda una escena en un especie de programa de comedia donde incluso están invitadas las risas grabadas de un público ficticio, donde todos los involucrados dicen chistes con gracia menos Rufus que no puede lograr que nadie exclame ni media sonrisa, un buen detalle que convierte este momento como uno de los mejores en toda la trilogía.
Al final, Deponia es una serie de juegos que sin duda no son para todo público, pues exigen mucha paciencia y cuidado en leer con atención la totalidad de los diálogos para seguir las pistas y resolver los acertijos; el estilo de aventura, contando con la característica del point and click, tiene su desarrollo en la habilidad del jugador para buscar objetos entre el escenario y saber encontrarles un uso. Un juego quizá diferente para la mayoría del público de las consolas pero no tan ajeno al de PC, pues esta forma de juego no es nueva.
Compartir en: