Hoy no estoy de mal humor, solo traigo atorados algunos temas con los juegos independientes que parecieran tener un buen argumento para salir a la venta, y después de un rato esos argumentos se caen a pedazos por el hecho de estar mal producidos, no contar con un apartado gráfico decente, o por contar con una jugabilidad pobre, tres factores sumamente importantes y de los cuales Sail Forth adolece de manera no tan grave pero algo preocupante.

ALGUIEN APRENDIÓ A CREAR MARES

Sail Forth es la travesía de un navío manejado por un monito medio extraño a través del océano más grande que haya visto en mi vida, no hay punto de comparación con los demás videojuegos. Este viaje se hace ayudado de un mapa poco entendible y que bien pudo haber sido mejorado para deleite del público, ya que de por sí andar navegando sin rumbo más que el marcado por un compás que a veces también se vuelve loco, no fue la mejor experiencia que haya vivido en el último cuatrimestre.

No digo que Sail Forth sea una basura de juego ni me estoy expresando de esta manera de él, es solo que hay muchos factores que bien podrían ser reducidos para tener un juego más compacto y que no se sintiera como un mundo abierto -o mejor dicho “mar abierto”- de esta magnitud, además con los diálogos que no tienen palabras sino más bien balbuceos, y con personajes diseñados para parecer extraterrestres, honestamente no encontré un punto de agarre para continuar investigando sobre esta aventura. Fueron algunas horas que le dediqué a tratar de entender el complicadísimo sistema de navegación donde frenar casi que no es opción, dar la vuelta resulta difícil hasta la pared de enfrente y disparar los cañones a veces es imposible por el radio de ataque en vez de la puntería precisa del cañón.

Sail Forth por fortuna tiene un apartado de peleas donde como ya comenté se agarran a cañonazos tremendos contra gente en islas, esto se hace para conseguir conquistar el pedazo de tierra y tomar los recursos, o por el hecho de que son piratas y son malos. Al menos esa lógica maneja el juego. También es posible darse unos buenos encontronazos con otros barcos siempre y cuando tengamos lo necesario para no salir tan perjudicados, porque a pesar de que el juego parezca sumamente casual por sus gráficos no tan pulidos, sin duda tiene sus dificultades bien marcadas, que no sé bien si sean por la programación o mal diseño del mismo juego, o porque así tuvo que ser, pero a veces las batallas navales se complican en exceso gracias al mal manejo del navío y de la extraña dispersión que tiene el cañón.

No estoy recomendando no pelear porque de ahí salen los recursos para mejorar la barca, pero definitivamente sean precavidos pues a menos que logren dominar el rarísimo control, en ese entonces podrán lanzarse a destrozar cuantas embarcaciones les sea posible, por más que no sea lo más divertido del mundo, ni del juego. En realidad no hay mucho donde divertirse con Sail Forth.

El apartado gráfico de Sail Forth sí es un tanto sencillo por no decir pobre, porque a pesar de que intentan recrear animaciones infantiles y de caricaturas para los pequeños del hogar, no terminan de convencer con ciertos modelos que no merecen mucha atención y deberían de haber quedado en el tintero nada más. Esto aplica también para los efectos especiales así como para el agua, los barcos y los pocos escenarios que existen.

VEREDICTO

Un juego hecho por programadores que claramente saben darle muy bien al código, pero que carecen por completo de un estándar bien definido de lo que desean plasmar en la pantalla, un estándar que quizá no es tan elevado y que por lo tanto carece de atractivo y que bien pudo haber sido desarrollado como otra cosa. El equipo de desarrolladores en Festive Vector tiene mucho trabajo que hacer si desea poner en el mercado otro producto bajo su nombre, porque a pesar de que hay talento, no se sintió que lo aprovecharan al máximo. Me remito a recomendar este juego en caso exclusivo de que ya estén cansados de mucho realismo o acción desenfrenada y busquen más bien algo con qué pasar el rato sin esperar mucho a cambio de su dinero.

Sail Forth ya está disponible en Switch, Xbox Series X|S y One, PlayStation 4 y 5, y PC por medio de Steam y Epic Games Store.