El fútbol americano corre por mis venas, bueno, más bien por mi familia. Tuve la fortuna de contar con un papá corredor, un tío receptor, un primo apoyador, un hermano mariscal de campo y el otro que se desempeñaba como safety. De ahí que desde pequeño mi amor a este deporte. Durante mi memorable –al menos para mi- carrera deportiva, jugué en todas y cada una de las posiciones existentes en el americano, a excepción del quarterback, pues mi brazo tiene la misma puntería que un borracho en el baño. Por lo que me considero bastante calificado para criticar la parte técnica de cualquier videjuego de esta disciplina.
Por lo tanto, durante los 14 años que lo practiqué, y como gamer, eran infaltables los juegos del deporte de las tacleadas. NFL Blitz, Madden y NCAA fueron mis favoritos, y ahora solo el Madden sobrevive a ellos, por lo que además es el único que sigo jugando. Sí, a pesar de que ha perdido cierto auge y respeto por los incontables defectos que le encuentran. Y claro que los tiene, como cualquier juego, el problema reside en que EA Sports levanta la vara muy alto al momento de publicitarlos, y a la hora de la hora, no es tanto como nos lo hicieron ver.
Teniendo entonces las bases suficientes para criticar y opinar, paso a la parte medular de este artículo. Mi ferviente deseo por defender el Madden 15 se hará presente por la nueva característica anunciada y poco explotada por la prensa en estos días: el contra bloqueo.
Para todos aquellos que no entienden bien la parte técnica de este deporte, permítanme explicarles qué es el contra bloqueo. En el fútbol americano existe la llamada línea de scrimmage –o de golpeo-, donde se coloca el balón en su punto muerto, y de ahí arranca la jugada. Cuando tenemos a la ofensiva y a la defensiva dentro del campo, siempre veremos en las formaciones, dos líneas de jugadores que se encuentran agachados y frente a frente: estos son los linieros.
Cuando el balón es entregado al mariscal, ambas líneas chocan, la ofensiva bloquea con el propósito de crear huecos por donde pase el corredor, o cuando hay un pase, intentan detener al defensivo o moverlo a una zona donde el quarterback esté más seguro. Los defensivos contra bloquean para cerrar esos huecos y “leer” la jugada que se desarrolla, o intentan quitarse al ofensivo para penetrar e intentar taclear al mariscal de campo.
EA Sports anunció con nulidad de bombos y platillos, el contra bloqueo de la línea defensiva, de hecho, si hubiera estado en el auditorio del E3, me hubiera puesto de pie y aplaudido un buen rato. Previamente en los juegos de Madden, al controlar a algún jugador de línea defensiva, era inmediato el contacto con el ofensivo, y era como un imán pues desprenderse del bloqueo era imposible, esto a menos que usáramos maniobras como el “slap”, “under” o giro. Maniobras que se practican mucho pero requieren pérdida de un tiempo, o de peor aún, de la posición de campo.
Pongámonos en los zapatos de un defensivo. Al iniciar la jugada queremos ganar el espacio donde estamos, evitando que el contrario nos mueva, con esto evitamos que se cree un hueco. En caso de que un corredor venga hacia ese hueco, podremos detenerlo si no nos hemos movido de ahí. Eso es el contra bloqueo, no permitir que nos muevan de nuestra posición quitándole la alternativa primaria al corredor, obligándolo a buscar otra opción. Madden también promete la característica de poder quitarnos al ofensivo e ir por el tacleo.
Estos dos movimientos son básicos para definir a un defensivo bueno, de uno sobresaliente. EA Sports debió de haber recibido –y estoy seguro que lo hicieron- retroalimentación de jugadores profesionales, entrenadores y sobre todo scouts que revisan videos segundo tras segundo encontrando esos detalles. Antes era imposible seleccionar a alguno de estos jugadores, pues realmente no creaban una diferencia en el juego. No quiero decir que no servían, pero las maniobras que mencioné anteriormente, se usan esporádicamente pues por momentos son arriesgadas.
El fútbol americano, el verdadero juego, se realiza ahí, en la línea de scrimamge. Son las trincheras, ahí es donde se gana o pierde un juego, controlando esa zona tan importante. Es la base de cualquier equipo exitoso. Dos ejemplos reales son la famosa cortina de acero, y la línea ofensiva que cubría a Troy Aikman cuando los Dallas Cowboys eran protagonistas de la liga. Si no se ganan esas yardas de la línea de golpeo, no se puede dominar un juego. Ahí está el punch, los golpes, la rivalidad y siendo sincero, lo más emocionante del deporte.
La mejora del Madden 15 en la parte del contra bloqueo es esencial para darle realismo al juego, e incrementar la importancia de tan necesaria unidad. Las defensivas ganan campeonatos y requieren de estos detalles que pueden cambiar un partido. Aplaudo fervientemente esta actualización, y la espero con mucha emoción. Espero no quedar decepcionado y estar pronto con mi reseña del Madden 15, para que ustedes, los mejores críticos se decidan por invertir, o no gastar en esta nueva entrega de tan épica franquicia.
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