La descripción de Distant Bloom es la siguiente y cito: “Te damos la bienvenida a Distant Bloom, un simulador de gestión de vida botánica lejos de casa.”

¿Qué quiere decir eso? Que de manera muy relajada estaremos plantando árboles, cactos, helechos, plantas vaya, en un planeta lejano al de nuestro protagonista y con la intención de reforestarlo o si quieren verlo de otra manera, de darle vida nuevamente ya que al parecer está sumamente deteriorado y es necesario que vuelva a florecer, literalmente.

Como pueden irse dando cuenta, Distant Bloom es un juego futurista y donde todos sus personajes son extraterrestres, es más, es un universo paralelo si así quieren verlo mejor, y nuestro deber es precisamente reforestar el planeta donde caemos y está desértico y no me refiero solo a su ecosistema, pues en el extenso mapa hay muchísimas zonas que muestran claros indicios de que la flora y fauna era rica hace muchos años pero que se ha tirado al traste y quién sabe porqué. Lo que es de destacar es que todas las zonas a pesar de estar muy descuidadas sí presentan señales del tipo de bioma que fue, como pantanos, desiertos, bosque, estepa y más, y por lo mismo las características del suelo están bien identificadas para que al momento de sembrar alguna planta, sea la que mejor funcione con dichas propiedades y así todo florezca, pues de lo contrario no habrá reacción positiva.

Sí en efecto el juego es un llamado tremendo a cuidar nuestro planeta pues todo el tiempo se la pasan hablando de que hay que cuidarlo, de salvar el medio, de cultivar y respetar el suelo y todas esas cosas que sabemos pero no hacemos para mantener sana esta nave donde todos viajamos. La propia historia del juego más los personajes tan raros pero tan útiles disfrazan muy bien el mensaje que no debe pasarse por alto. Y se ayuda de la misma para en verdad tomarse en serio el juego que puede llegar a ser tan largo como queramos pues las zonas de cultivo son muchísimas y van desde las más pequeñas hasta la más grandes, además de tener la posibilidad de crear fertilizantes con el fin de cosechar semillas nuevas para más variedades de plantas. Y si no nomás quieren entrarle a la botánica, también habrá misiones donde podrán salvar animalitos pertenecientes a la rarísima fauna del planeta, pero que de cierta manera se parecen a lo que ya conocemos, así que no esperen cucarachas gigantes que atacan y quieren vernos muertos, más bien tengan en cuenta que habrá muchísima tecnología de por medio y portales que nos harán volar por los aires para llegar a puntos imposibles de alcanzar a pie.

Oh sí, Distant Bloom no es un juego cualquiera que se dedique a plantar árboles y ya, se trata de descubrir el secreto detrás de ese planeta el cual a la fecha no lo hallé, pero me divertí mucho intentándolo. Pero Distant Bloom no es perfecto, por desgracia dista de serlo. Aclaro que no es malo, pero precisamente su sistema de posicionamiento es lo que le quita una cantidad tremenda de puntos. Tenemos una brújula, sí la tenemos ok, y esa misma nos indica la dirección más no posición exacta de lo que estamos buscando, hasta ahí todo bien, el problema es que tenemos un mapa con la delimitación de las zonas pero no podemos ni de chiste ver en dónde está nuestro personaje como para ubicarnos, no podemos poner marcadores con algún lugar de interés, evidentemente no hay manera de que la IA nos haga una ruta hacia donde queremos ir, nada, simplemente es seguir caminando tratando de recordar exactamente la ubicación y tratando de reconocer lo que vamos viendo y solo así acercarnos al punto final de nuestro viaje. La única gran ventaja de la movilidad del protagonista es que en el menú podemos seleccionar regresar en automático al campamento base y sin costo de algún recurso, pero para volver a donde estábamos no hay otra forma más que caminando, al menos es a buen paso porque ni caminaremos lento pero tampoco podremos correr ya que esa opción no existe. Tanta tecnología dentro del juego para no poder ni de chiste crear portales o rutas inteligentes. Nada, cero.

No le quitaré puntos a Distant Bloom por la música tan aburrida que tiene ya que sí nos permite bajarle todo el volumen a la misma, nomás quería hacer el apunte de que es muy mala. Y gráficamente el juego brilla por ser lindo, tener una buena iluminación, gran paleta de colores para identificar todas las zonas y con efectos especiales más que agradables.

Pero ni la parte gráfica no salva del terrible…

VEREDICTO

Distant Bloom es un juego bonito con gran mensaje. Me encanta eso de reforestar y cuidar el medio ambiente, aunque sea en píxeles porque en la vida real no me verán con una pala y sembrando árboles –aunque sí lo he hecho-. El problema del juego es que no nos da tantos recursos de ubicación como para tener en cuenta que nos falta para terminar las zonas y de verdad ayudar a dicho planeta a que recupere la belleza natural.

En su parte técnica Distant Bloom no tiene fallos, la programación no comete errores, los gráficos se ven bien y tampoco caen en glitches, el sonido está bien diseñado y la jugabilidad es buena, nos da chance de hacer varias horas por todas las zonas para reforestar pero definitivamente la dificultad para ir a los lugares importantes por su falta de marcadores, ubicación del personaje, rutas de IA o al menos un mapa con un plano cartesiano es lo que hace del juego algo tedioso por la constante búsqueda de pasajes o caminos hacia nuestra meta, eso y la repetición exhaustiva de cavar y sembrar que por momentos puede ser aburrida ya que básicamente es lo único que se puede hacer.

Distant Bloom está ya disponible en PlayStation 5, PlayStation 4 y Switch.