Desarrollado por Pulsatrix Studios, conocidos por el juego de horror Fobia – St. Dinfna Hotel, ahora su nueva entrega, A.I.L.A., no solo ofrece una jugabilidad tensa, sino que también nos sumerge en una trama envolvente que hace que el horror se sienta cercano y sobre todo, perturbador.

En A.I.L.A. tomamos el papel de Samuel, un tester de videojuegos que vive en una casa inteligente, en un futuro cercano. Y, en un giro inesperado, Samuel recibe un dispositivo de realidad virtual que lo conecta a A.I.L.A., una inteligencia artificial avanzada encargada de ofrecerle una serie de juegos de terror inmersivos, adaptados a sus propios miedos y comportamientos. Obviamente, a medida que Samuel interactúa con A.I.L.A., la IA aprende de él, personalizando las experiencias para hacerlas aún más aterradoras y vívidas, llevándole en una montaña rusa de terror y suspenso donde Samuel deberá luchar con sus propios miedos, en mundos llenos de horrores y un nivel de gore bastante visual (así que es un juego para adultos).

El concepto de A.I.L.A. es sin duda llamativo, a medida que avanzamos, nos damos cuenta de que cada juego dentro del juego es una experiencia única, diseñada para inquietarnos de maneras distintas, desde el miedo psicológico hasta el terror visceral, con momentos de claustrofobia, combate contra muertos vivientes, e incluso de resolución de acertijos sangrientos. La variedad de escenarios y mecánicas mantiene la experiencia fresca, aunque algunos instantes pueden sentirse repetitivos debido a la naturaleza de los acertijos. Aquí es bueno decir que el título tiene una duración justa de unas 8 horas, por lo que nunca llega a ser cansado o que sintamos demasiada la repetición.

Uno de los puntos fuertes de A.I.L.A. es, como pueden imaginar, su capacidad para mezclar diferentes subgéneros del terror. Desde los survival horror, hasta horror psicológico, pasando por momentos de acción frenética, cada fase ofrece algo nuevo. Enfrentando acertijos en un entorno claustrofóbico, mientras que en otro escenario estamos atrapados en medio de una tormenta, luchando contra enemigos grotescos que parecen sacados de una película de terror de serie B. Este enfoque multifacético mantiene la tensión durante todo el juego, con un ritmo que alterna entre momentos de calma e intensos, creando una atmósfera perfecta para los fans del horror y, a pesar de que algunas experiencias pueden sentirse más saturadas que otras, en su conjunto A.I.L.A. brinda una experiencia no deja de sorprender. Repito, esto también gracias a que el título no se extiende demasiado. Otro punto a favor es que A.I.L.A. prefiere crear incomodidad a través de giros sutiles, sin abusar de los típicos jumpscares, lo que hace que la experiencia se sienta más psicológica y menos predecible.

En cuanto a su apartado visual el juego brilla gracias a la potencia del Unreal Engine 5 con buenas texturas, algunos modelados e iluminación; aunque no alcance los niveles de producción de un triple A, el diseño de los escenarios y la iluminación cumplen bastante bien, aportando esa atmósfera opresiva y realista que caracteriza al horror. El uso de tecnologías avanzadas como Lumen y MetaHuman refuerzan la inmersión, haciendo que los personajes y los entornos sean más reales y al menos en consolas Xbox Series X|S el título funciona bien, con una velocidad de cuadros constante.

A.I.L.A. es un juego de terror único que va más allá de los convencionalismos del género; su narrativa inmersiva, la variedad de escenarios y su enfoque en la personalización del miedo lo convierten en una experiencia que difícilmente olvidarán. A pesar de algunos pequeños fallos en ciertas secuencias que podrían estar mejor pulidas, el juego consigue asustar, inquietarnos y entretener en su narrativa.

Si son fans del horror y buscan una nueva experiencia A.I.L.A. es para ustedes y que además pueden probar con una demo en Steam. A.I.L.A. está disponible en PC, PlayStation 5 y Xbox Series X|S, con un 20% de descuento durante las dos primeras semanas.