Amo los perritos, también a los gatos pero sobre todo a los canes, entonces este juego debía ser para mí porque básicamente se trata de cuidar animalitos que requieren un cuarto mientras sus dueños no pueden estar con ellos por cualquier razón, y en este caso la idea de Pets Hotel es de darlos todas las atenciones necesarias para que esos días alejado de su mejor amigo, pueda pasarlos tranquilamente.

En Pets Hotel seremos el gerente/recepcionista/conserje de un hotel de mascotas en el que recibiremos a las mismas en manos de sus dueños quienes nos dirán las características óptimas de sus animalitos, ya sea como que no es muy sociable, le gusta que lo acaricien, si tiene hambre o requiere cortarle las uñas, incluso la peluquería o hasta un veterinario, además de las noches que estará con nosotros. Concluido ese periodo el dueño irá por su mascota y nos pagará, después nos hará la calificación acorde a nuestro desempeño. Entre mejores estrellas pues claro que tendremos más visitantes. El punto del juego evidentemente es durar la mayor cantidad de tiempo en operación -incluso hay trofeo para eso-, pero también para estar a la vanguardia, podremos ampliar nuestro hotel como queramos y con todas las amenidades posibles para que sea mucho más atractivo para el cliente humano, y por supuesto para el cliente de cuatro patas.

Todo suena genial porque en verdad amamos a los perritos y gatitos, pero el problema viene con la parte técnica del juego, el cual en realidad es un simulador de cuidado de animales con modelos genéricos sacados de una librería que quizá la compraron por algunos dólares y decidieron sacar toda la cantidad posible de animales. Los gráficos son realmente pobres desde los edificios, detalles, mapeos, texturas y obviamente los efectos especiales que son casi nulos o con calidad mínima. Los menús están diseñados para no lucir muy bonitos posible y además que desaprovechan la facilidad de usar el cursor como si fuera mouse, entonces hay que estar saltando de opción en opción y a veces sin pies ni cabeza. Como buen juego genérico, cuenta con todas las fallas habidas y por haber de selección de objetos y por supuesto el tan entrañable glitch de la apertura de puertas, que sin importar tu ubicación, o te atraviesa o te deja a medias. Pero bueno, al menos se puede acariciar a los animalitos y que nos agradezcan con sus boquitas.

Por otro lado está la lista de trofeos que es bastante larga y que nos pedirá jugar al menos unas 30 horas, por lo que la rejugabilidad es muy alta, sin embargo es la pereza de hacer todo igual siempre lo que podría mantenerlos alejados de lograr esos 100 días continuos de operación para nuestro hotel. De ahí en fuera son cuestiones relativamente sencillas y que requieren acumular tanto como puedan, y evidentemente cuidar a la mayor cantidad de animales posible. Y es que por más rejugabilidad que tenga -y no por la cantidad de modos de juego- es tediosa la actividad del cuidado de los animales pues realmente no se hace absolutamente nada más. Entonces yo por ahí es donde empecé a aburrirme y pedir esquina. De verdad.

VEREDICTO

El juego por más trofeos y/o logros que tenga, no es suficientemente convincente para que le demos muchas oportunidades, es más, yo no podría darle una más porque desde que aparecemos en el hotel y vemos lo aburrido que será tratar animales uno tras otro, ya desde ahí no desearemos estar mucho tiempo ahí metidos. El costo del juego no amerita gastarlo y luego vernos en la penosa necesidad de borrarlo a más tardar unas tres o cuatro horas después. Si ustedes llegaron a la quinta hora, felicidades, tienen un aguante tremendo.

Pets Hotel está disponible en PS5, Xbox Series X|S y PC en Steam.