Touhou Genso Wanderer: Foresight | Reseña

Una serie de hartos juegos japoneses que de inicio parecerán pesados y quizá hasta aburridos, terminaron convirtiéndose en una chulada de vista superior y gráficos súper tiernos con protagonistas que terminan siendo rudísimas en los golpes y los hechizos, un RPG lleno de acción y peleas que no abusa de las escenas llenas de diálogos que terminan hartando al usuario.

Jugaremos commo Reimu en Touhou Genso Wanderer: Foresight acompañado de más amigas que pelean no solo con sus puños y armas sino que también harán uso de hechizos propios y otros que encontraremos en el camino, todo esto en escenarios que están divididos en niveles hasta llegar al final donde seguramente habrá un jefe final, el primer calabozo es casi gratis pues habrá pocos enemigos y ningún engendro maligno del mal al final, lo cual asegura un buen aprendizaje especialmente cuando se trate de lanzar los pases mágicos. Cada nivel debe ser descubierto por el usuario hasta llegar al portal que nos llevará al siguiente y así sucesivamente, por lo que la exploración es primordial no solo para hallar el camino correcto sino para recolectar pociones de vida, hechizos, armas y evidentemente, al enemigo. Mi recomendación es que no dejen un solo lugar sin peinarlo para llevarse todo lo posible y luego venderlo por sumas altas de monedas de oro.

El combate es el pan de cada día pues mínimo por nivel se tendrán que agarrar a golpes unas diez a quince veces, son peleas muy leves y casi no le sufrirán, pero les servirá para aprender los controles, hechizos y prepararse para cuando les toquen los difíciles, porque las damas malditas –casi todo el juego tiene a mujeres de ambos lados- atacarán con toda su furia y pareciera que alguien dijo puras cosas erróneas cuando no era indicado. Así que a pesar de ver un título levemente relajado, conforme suban de escenario encontrarán más enemigos y mucho más complicados.

Hay que reconocer que el juego es repetitivo porque al pelear estaremos compitiendo contra los mismos diseños de malhechores, pero es gracias a la variedad de ellos, de armas, armaduras y hechizos, que se irá rápido el tiempo y querrán atravesar todo el bendito calabozo para hallar al jefe final y conseguir experiencia, mejoras para su personaje y especialmente, las mejoras para la villa donde estaremos regresando a estar a salvo, convivir con las amigas y conseguir mejores habilidades para desarrollar a nuestra protagonista, como a sus amigas combatientes y que ayudan tantísimo.

Durante las horas que estuve conociendo la dinámica del mapa y de cómo movernos hacia otras direcciones, también la curva de aprendizaje se achicó gracias a que todo el tiempo nos estarán facilitando información de las habilidades, y de la administración del espacio y los objetos a nuestra disposición, por lo tanto es que no se vayan a desesperar al inicio ya que sí atiborran cuando uno va iniciando, pero con que entendamos que se trata de pelear y poner atención a los íconos de los enemigos, ya tendrán más de un pie adentro, pues los combates requieren no solo pegar brutalmente y a lo desesperado, sino encontrar las armas que más daño hacen al rival acorde a sus debilidades. Por no hacer caso a mi consejo es que morí constantemente con el primer jefe que me tocó después de casi 26 pisos recorridos. El secreto nomás era la arma a empuñar.

VEREDICTO

Jugado en un Nintendo Switch (También disponible en PS4 y PC) no me cabe duda de que tiene todo el potencial para divertirnos por horas tanto en un viaje larguísimo como sentados y proyectándolo en su televisor, a pesar de parecer muy casual tiene todos los elementos posibles para entretenernos y convertirse en un juego que no dejaremos tan fácil de lado gracias a su historia, sus cinemáticas, y especialmente las peleas contra los jefes de nivel que terminan teniendo un grado decente de dificultad pero jamás se convierten en un martirio, nomás hay que saber qué usar a la hora de los trancazos.

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