The Beast Inside | Reseña

Cuando un juego tiene referencias incluso literarias a “El Extraño Caso del Doctor Jekyll y Mr. Hyde”, sabemos que tiene potencial al menos de ser una buena historia y quizá nos dé información clara de que habrá muchos asesinatos, sangre y sustos, y en el caso de The Beast Inside, la mezcolanza de todos los géneros a los que recurre, es la clave del éxito de este título que ya tiene rato en PC pero va llegando a consolas y lo hace de una manera perfecta, en Halloween.

The Beast Inside cuenta con los siguientes géneros para que se vayan dando una idea de la mega mezcla: terror paranormal, puzzles, FPS, supervivencia y exploración, además tiene varios finales y por lo tanto contiene una rejugabilidad tremenda. Pero no empecemos por ahí, mejor los engancho con la historia. Adam que es un criptoanalista de la CIA, decide irse a vivir con su esposa embarazada a una casa situada en el bosque hermoso y frondoso, en el cual a pesar de que parece una especie de retiro prematuro, en realidad es para trabajar en más códigos que su agencia le envía con la intención de terminar con la Guerra Fría. Esta casa que ya había sido ocupada con anterioridad, resulta tener más secretos de los que Adam y Emma esperarían, el problema es que los mismos hacen que Adam tenga recuerdos vívidos sobre terribles crímenes escritos en un diario por un tal Nicolas Hyde. Haber leído dichas cartas provocan una seguidilla de capítulos en nuestro juego que nos tendrán investigando en la actualidad de Adam, y los recuerdos plasmasdos en dichas páginas.

The Beast Inside se maneja en capítulos no tan cortos pero que se van como agua, todos ellos alternan entre 1979, la época actual del juego y el siglo 19 donde ocurren los asesinatos descritos en el diario, por lo que tendrán descanso de los sustos pues sí les puedo asegurar que en uno habrá miedo y penumbra y en el otro luz y calma para investigar relajadamente todo lo que esté sucediendo en el capítulo anterior. The Beast Inside maneja muy bien el suspenso durante todo el juego, no solamente cuando estemos esperando un susto, pues gracias a la atmósfera es que podemos sentirnos en constante tensión, adicional los gráficos realizados en Unreal Engine son verdaderamente una belleza y más cuando estamos en el bosque y las cuevas, ya que en ocasiones la calidad de las texturas baja un poco al estar cerca de algunos objetos que no se ven tan reales. Justamente hay lugares que lucen híper realistas y otros que lucen muy bien pero sin llegar a sorprender como los primeros. Los efectos de penumbra, neblina, la luz, los reflejos y la música generan el espacio casi idóneo para desarrollar estrés en el gamer, por lo que la tensión está garantizada en cualquier episodio, nomás que esperen a desarrollar un efecto pavloviano pues al ver oscuridad al inicio de un capítulo, definitivamente entrarán en modo miedo, se los aseguro.

El desarrollo del juego es maravilloso ya que inicia con tensión, después nos explica un poco de qué va la historia, continuamos con tensión, más investigación y exploración, y conforme avanzamos veremos a nuestro personaje explorar nuevos lugares, recorrer caminos más sinuosos, utilizar aparatos, descifrar códigos, abrir candados -chulada de mecánica para abrir candados-, escapar por afuera de edificios, usar objetos para bloquear entradas, disparar, rapelear… en verdad los desarrolladores utilizaron muchísimas ideas en su cantidad correcta para no abusar de dichos recursos, pero tampoco agregarlos y después olvidarlos, cuando crean que ya no volverán a usar alguna mecánica, zaz, vuelve a aparecer y debemos usarla o de lo contrario no podremos continuar con la historia. Todo muy orgánico honestamente.

¿LA BESTIA ESTABA DENTRO DE NINTENDO SWITCH?

Tuvimos la oportunidad de jugar The Beast Inside en dos consolas, la primera fue Nintendo Switch y déjenme decirles que a pesar de las limitantes gráficas que ofrece el sistema, el juego corre de manera súper fluida, no hay caídas de cuadros, los efectos lucen bien aunque a veces la bruma no se aprecia del todo perfecta, la iluminación permite fácilmente identificar los objetos, las texturas denotan inmediatamente si es madera o metal, pero sí existe una baja en la calidad cuando se refiere a objetos traslúcidos tales como algunos fantasmas, recuerdos y por supuesto todo lo que es vidrio. Si jugamos en modo portátil nomás hay que tener cuidado de la iluminación ambiental porque podría hacer que no viéramos casi nada en ciertos momentos, pero si lo hacen en modo dock definitivamente no tendrán problema, e incluso aunque el juego no luce tan realista por los gráficos saltarán en las escenas donde tengan que saltar, pues repito, lo visual es parte importantísima para generarnos miedo y tensión, pero son el audio y la música los que logran tenernos al filo del asiento o de plano querer dejar el control por la tensión que se genera. Solo hay un detalle que sí me salta y por momentos fue molesto, y esa es la mecánica de la apertura de las cerraduras pues por alguna extraña razón funciona mal y al parecer tiene algo que ver con los cuadros de la animación que no permiten atinarle a los pistones de la chapa. Esperemos se arregle pues hubo un momento que pensé en dejar el juego por este problema. De ahí en fuera, The Beast Inside no es un port entre consolas, realmente se detuvieron a hacer el downgrade necesario para la consola de Nintendo y así poder disfrutar del juego sin caídas a pesar de que los tiempos de carga sí son un poco largos, pero nada que nos provoque abandonar la partida.

¿Y QUE TAL CON EL PLAYSTATION 5?

La potencia de la consola de Sony hace de este juego uno muchísimo más tétrico gracias a que se aprovecha al máximo el apartado gráfico, que como ya dije previamente, el juego está hecho en Unreal Engine, por lo que luce fantástico en todas partes, incluso en la penumbra y con neblina es maravilloso el efecto de poder ver a unos cuantos metros y gracias al sonido es que los escapes resultan vertiginosos gracias a que podemos saber perfectamente desde donde vienen los ataques. Cada efecto especial es genial y en nuestra nada humilde opinión, es en esta consola en donde el impacto visual es mucho mayor. Sí debo reconocer que al aparecer cada trofeo hay una caída de frames sumamente marcada, pero una vez que deja de salir el anuncio todo continuará perfectamente. El error de las chapas en PlayStation 5 es nulo, aquí incluso abrirlas será facilísimo y a la primera. Si sigo hablando de los gráficos debo mencionar que la iluminación es soberbia y se nota mucho más en las sombras, pues en escenas de lluvia veremos claramente como se reduce la luz gracias a las nubes y objetos que la bloquean y es que sí es muy importante esos detalles en juegos de terror pues el vaivén entre luz y sombra son la clave para generar ese miedo y tensión tan necesarios.

VEREDICTO

La palabra “tensión” la he escrito varias veces y es que The Beast Inside sin duda lo genera todo el tiempo, repito, gracias a sus gráficos y efectos especiales con la mega ayuda del sonido y música. La historia es sumamente entretenida y contiene varias referencias a la obra maestra de Robert Louis Stevenson, incluso una de las notas es literalmente un fragmento de dicho libro. Las escenas de persecución son fáciles de sortear pero sumamente agradables por todo lo que sucede a nuestro alrededor, pues además incluyen ciertos eventos quicktime que podrían resultarnos fatales de no poner atención. Por fortuna The Beast Inside es un gran juego en cualquier sistema que se juegue, esto gracias al gran trabajo de los desarrolladores en solo hacer un port para ganar dinero, sino para entregar material de calidad para todos los usuarios, sí en efecto hay algunos errores leves que no provocan el mal funcionamiento del juego pero que bien podrían arreglarse para hacer una experiencia redonda. Una recomendación entera no solo para Halloween sino para cualquier momento del año, siempre y cuando sea con las luces apagadas y esperando gritar muchísimo.

The Beast Inside está disponible en Switch, PS5, PS4, Xbox One, Xbox Series X|S y PC (Steam).

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