Starfield | Reseña

Bethesda Game Studios entrega Starfield, su nueva IP para Xbox Series X|S y PC, una aventura espacial sin precedentes donde los jugadores fanáticos de los títulos de la desarrolladora, como Fallout o la serie Elder Scrolls como Oblivion sin duda se sentirán como en casa, gracias a la construcción de un universo muy detallado y lleno de elementos de rol y exploración, con unas muy buenas dosis de combate que tendrán que encarar de formas dinámicas mientras exploran diferentes mundos.

Starfield, para los fans de los juegos de Bethesda, seguro no los tomará por sorpresa, se trata de una entrega de ciencia ficción donde las primeras horas serán de creación de personaje, aprender detalles sobre la jugabilidad y dar los primeros pasos en este nuevo universo listo para explorar con nuestra nave espacial… construida, robada en algún planeta lejano o abordada en el espacio como buenos piratas espaciales, la decición en cómo los jugadores forman su aventura son muy variadas, y como es de esperar, con muchas líneas de diálogo con NPCs para tomar misiones y resolverlas de diferentes modos: políticamente, a cambio de algo o simplemente a base de combates a muerte.

Starfield es una aventura como no se había visto y no lo digo por sólo poder viajar a otros mundos vistos en el firmamento, si no por el conjunto de cosas que se pueden lograr. Ya dije que crear una nave espacial es quizá lo más llamativo, pues gracias a un sistema por módulos, podrán dar rienda suelta a su imaginación y crear algo tan simple como un cubo gigante, hasta algo sacado de una película, serie o anime de ciencia ficción, la opción es suya y lo único que necesitan es suficiente imaginación, tiempo y suministros encontrados a lo largo de las exploraciones… entre otras cosas, claro. Pero Starfield va más allá de crear naves y despegar a otros mundos o pelear en el espacio. Estas naves están completamente detalladas desde el exterior al interior, reflejando que la nueva generación está aquí, Starfield es un juego que se nota sólo ha sido posible en PC y en Xbox Series X|S.

Más allá de las naves y su fantástico control de movimiento en el combate y la libertad para intentar robar alguna, acabando con toda su tripulación hasta llegar al puesto de mando, el juego tiene una inmensa libertad para realizar comentarios con los NPCs que encontremos en nuestra aventura, incluso, además de poder completar las misiones a nuestra forma, podemos tener relaciones más “emocionales”, entregando una aventura que seguro nos recuerda al grande Mass Effect. Starfield sin duda ha quedado entre los grandes de esta generación por esta exploración de decisiones que hace de cada partida algo único y que, llegando al final para iniciar de nuevo, nos dejará con las ganas de intentar de forma diferente las cosas, quizá algo más tranquilo, o algo más intenso para acabar con todo. Por fortuna los verdaderos exploradores que disponen de tiempo disfrutarán aún más el juego por la ausencia de un mapa, lo que lleva a que vagar en el universo de Starfield sea algo desafiante, pues visitar planetas, entrar a instalaciones o llegar a las inmensas ciudades se convierte en un reto de memoria. Aquí puedo decir que ojalá, Bethesda, actualice su juego para ayudar a quienes no tenemos tanto tiempo para perdernos (en pocas palabras), pero tampoco es que sea algo que entorpezca lo disfrutable del título, pues la cantidad de escenarios y su buen detalle hacen que uno se detenga muchas, muchas veces a admirar la vista ¿Y ya hablé de las naves? ah sí.

A estas alturas ya sabrán que Starfield funciona a 30fps en las consolas de nueva generación de Microsoft, la buena noticia es que son bastante estables y sólo en una de las ciudades grandes y en momentos exactos se siente la carga de escenario con la caída ligera de cuadros por segundo; fuera de eso los combates, donde abunda la acción desenfrenada, son totalmente geniales, con todo tipo de efectos, disparos y explosiones, con una IA enemiga que a veces sabe muy bien cómo atacar y otras se sienten como piñatas. Otro de los puntos más importantes y que hacen asombroso a Starfield es que estos combates son totalmente dinámicos, y además de lograr mejorar con habilidades, equipo y armamento, cada mundo visitado nos entregará una forma diferente de tener que actuar gracias a su gravedad, incluso tendremos que cambiar el estilo de munición, desde proyectiles hasta rayos láser, y nuestro movimiento también se verá afectado, así como las físicas de todo el entorno. En este sentido Starfield brinda una experiencia muy entretenida y fresca que nos lleva entre planetas y al espacio exterior para encontrar otros mundos y toparnos con otras naves, entrando así en combates donde el mejor preparado será el ganador sin duda, es muy impresionante y jugar con un sistema de sonido es imprescindible, gracias a unos efectos contundentes y una épica banda sonora que no dejarán de escuchar en su mente luego de quitar el juego. Se podría decir que Starfield nos mete de lleno en su universo y los minutos se convertirán en horas.

Hablando un poco más de jugabilidad, otra estrella del juego sin duda, el título guarda muchas reminiscencias y se siente el aprendizaje de Bethesda con sus anteriores entregas; de hecho hay una mejora que tiene una “flecha en la rodilla” algo que hará sonreír a los fans. Entre otras cosas, el juego también se sirve obviamente de las nuevas memorias de nueva generación, gracias a unos tiempos de carga muy rápidos y que eso sí, nos llevan por varias pantallas de carga al entrar a planetas, zonas en específico o cambiar de lugares de aterrizaje en los planetas. Con esto me refiero a que cada planeta no es un mapa completamente abierto, más bien zonas delimitadas para explorar ya sea para cumplir misiones, acabar con la flora y fauna, villanos o buscar elementos, herramientas, armas y etc. Así que, si desean explorar un mundo, lo único que deberán hacer es despegar su nave espacial y dirigirse a otra zona. Igualmente se puede decir a que esta carga de zonas ayuda a que el juego tenga tanto detalle y ojalá un día haya una actualización que nos entrega los tan deseados 60fps. Finalmente un detalle, Starfield tiene primera y tercera persona, así que si desean admirar continuamente a su personaje creado y armado hasta los dientes, simplemente cambiarán a esta tercera persona para tener una perspectiva clásica sobre el hombro para los combates, esto podría ayudar a no “sentir tanto” los 30fps, pero eso ya dependerá de cada jugador, yo en lo personal encuentro a gusto estos 30fps ya que da un sentimiento más cinemático, aunque si me doy cuenta que 60fps en combate ayudaría más a resaltar las físicas de cada cambiante mundo, bueno esa es mi opinión.

Starfield cabe decir para alegrarnos el día, que el siguiente año tendrá también soporte oficial para mods, así que la comunidad seguro ya estará pensando en qué sorpresas brindarnos, quizá un mapa para las ciudades (ejem), o vehículos, monstruos, algún jefe, armas, ¿planetas enteros?, no sabemos, pero seguro será emocionante y ayudará a mantener vivo el juego.

Creo que Starfield es el juego que se estaba esperando en Xbox Series X|S, algo que mostrara la nueva generación, con un nivel gráfico bastante detallado, quizá menor en rostros (pero es algo clásico en títulos del desarrollador), y con amplias posibilidades de jugabilidad; es una entrega de esas “vende consolas” que merece estar en la caja de cada producto. Esperemos que Starfield siga mejorando con el tiempo y que su comunidad crezca el año que viene con la inclusión de mods. Además hay que recordar que Starfield está disponible por medio de Xbox Game Pass en consolas y PC así que realmente no hay pretexto para no jugarlo.

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