Jon Favreau entrega justo lo que el título dice, un western de “policías y ladrones” que de pronto se sumergen en conflicto con seres del espacio.
Una cinta que básicamente toma lo que uno se podría imaginar sobre un viejo oeste y le suma por igual lo que se podría esperar de una lucha contra extraterrestres… o, al menos algo cercano. Vaqueros y Aliens, un título del que muchos sienten aberración y otros expectativa por lo que estos dos términos parecen tanto así como el agua con el aceite.
¿Elementos que no se mezclan? ¿es esta una mala broma? No, de hecho es una historia muy levemente basada del comic (de 2006) de mismo nombre creado por Scott Mitchell Rosenberg y escrito por fred Van Lente y Andrew Foley. En dicho comic los aliens están aquí para esclavizar la raza humana (en pocas palabras), al contrario del guión por los varios escritores de la “adaptación” a pantalla grande, una que toma el nombre prestado de la fuente original y le agrega cosas que quizá a muchos no les agraden.
Sin embargo ¿es tan mala y apestosa? Para comenzar es una película que fácilmente entretiene y con sus varios elementos y clichés sumerge al espectador primero en una trama ya clásica del viejo oeste, esto es el típico encuentro del forajido que no es tan malo y la ley que a pesar de quererlo atrapar, decide que también puede necesitar de su ayuda, claro, con una historia misteriosa que poco a poco revela sus secretos y por último pero para nada menos importante, la inclusión de seres provenientes del espacio exterior.
Alienígenas que abducen a las personas, que están en la Tierra (por algo casi típico) y que por cierto tienen un diseño bastante bueno y muy cercano a los mostrados en District 9… ok, y a decir verdad solo tengo una pregunta ¿Por qué estos seres normalmente se presentan desnudos? Hablando de este caso nunca queda claro, en fin, algo no muy importante.
Lo que sí es importante son algunos detalles en la trama que al final quedan sin resolver, detalles que hubiera sido muy interesantes conocer sobre todo hablando del pasado de los personajes ya que básicamente la historia se sustenta en ellos, hablando de esto debo aclarar que “hay más vaqueros que aliens” sí, seguro hay escenas de persecuciones caballos vs naves e indios que pelean cuerpo a cuerpo con estos “invasores” (por cierto muy violentos a pesar de la clasificación de la cinta), pero estos momentos suben de nivel hasta el clímax de la historia, es decir, los últimos veinte minutos; antes de eso aún hay algún que otro encuentro pero nada muy asombroso o espectacular.
Los efectos especiales, sobre todo los de criaturas, son muy buenos y a pesar de esta mezcla “agua con aceite” nada desentona gracias a una fotografía cálida donde los tonos cargados contrastan con los cielos azulados del desierto; las actuaciones (con clichés y todo) son correctas, resaltando obviamente las de Harrison Ford (un veterano aguerrido) y Daniel Craig (el rudo pistolero).
Al final la cinta (ubicada en 1873) junta dos mundos de los que fácilmente uno puede tomar cosas que le gusten, para los fans del western hay persecuciones, bandidos y mucha “mala actitud” y para los amantes del sci-fi los diseños de extraterrestres y los encuentros (sobre todo al final) son buenos, aunque claro, debieron ser honestos y en lugar de nombrar esta película Cowboys & Aliens, debieron poner “More Cowboys than Aliens” aun así esta ligera adaptación no es tan mala como pintan y cumple su objetivo: entretener. Por cierto, todo lo anterior fue un comentario personal.
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