Del editor Bethesda Softworks y el desarrollador Arkane Austin llega uno de los exclusivos más esperados para Xbox Series X|S y para PC en Steam, se trata de Redfall, una experiencia para un jugador y cooperativa en mundo abierto y donde estaremos luchando contra vampiros, enemigos humanos y otros, para tratar de librar una ciudad, mientras vamos descubriendo su trama. El juego, que sin duda guardaba las esperanzas como uno de los fuertes de Xbox para este año, sin duda ha quedado como una mancha para el estudio Arkane, quienes en el pasado nos dejaron juegos muy importantes como Dishonored.

A estas alturas estoy seguro que todos ubican a Redfall, un shooter en primera persona o cooperativo donde nos daremos la tarea de explorar la ciudad isleña de Redfall, Massachusetts, la cual está asediada por una horrible legión de vampiros, quienes aislaron a los ciudadanos del mundo exterior y además, han tapado el sol.

El juego sin duda suena simple, y verdaderamente lo es. Lamentablemente Redfall no ofrece nada nuevo que nos haya ofrecido ya otro juego de mundo abierto y cooperativo, así que estaremos realizando las tareas más comunes que puedan imaginar, como desbloquear partes del mapa (como otra nueva zona con diferentes facciones), descubrir refugios, liberar civiles y destruir vampiros y sus cómplices, encontrando así mejoras para nuestras y recursos para conseguir dinero, comprar nuevas armas y etc. Como dije, Redfall no revela nada nuevo bajo el sol, lo cual podría servir para que los jugadores le agarren el ritmo rápidamente, pero claro, entonces es cuando empezamos a descubrir una buena serie de fallas, un mal diseño, una jugabilidad lenta y entornos más bien genéricos que no aportan muchas sorpresas.

A pesar de que las misiones se pueden realizar de manera abierta, es decir, de la forma que se les ocurra, el título se enfoca en los disparos más que en el sigilo, entregando así menos detalle a las muertes que realicemos, aunque eso sí, la IA puede llegar a ser tan torpe que a veces simplemente será necesario rodear un auto para entorpecer al enemigo; o por poner otro ejemplo no detectarán las trampas que pongamos y al parecer los humanos no coordinarán ataques en conjunto, es decir sólo estarán ahí para recibir los disparos y prácticamente podremos estar agachados frente a ellos para que nos pierdan de vista… hey, a veces hasta se les podría dificultar subir una escalera. Bueno, con estos ejemplos es ya suficiente.

Entonces a la espera de una serie mejora de la IA, y olvidando el diseño de las misiones a realizar, otro asunto bastante impactante son las gráficas que dejan mucho que desear, como si fuera un juego de anteriores generaciones, con texturas borrosas y de mala calidad, unos modelados muy básicos (entorno, objetos y personajes), efectos sencillos y hasta varios momentos de caídas de cuadros por segundo (incluso bloqueo de 30fps en Xbox Series X|S), detalles muy evidentes y que ojalá hubieran retrasado el juego más tiempo para quedar solucionados. De hecho, a veces hasta el diseño de arte podría resultar genérico o, en pocas palabras, por todos lados hay cosas que mejorar en Redfall.

Tristemente no hay mucho que decir de Redfall, pues la verdad lo poco bueno es fácilmente opacado por sus errores. El juego en sí puede llegar a ser entretenido gracias a las varias habilidades de sus personajes (usar un bot de defensa, habilidad para saltar esquivar balas, y más) y estar entrando a las casas y otros lugares para descubrir ítems y chatarra puede ser entretenido, sin embargo los mapas se pueden sentir sin vida, vacíos y simples, y las misiones son tan comunes que uno siente que ya las ha hecho en otros varios juegos (no se siente una personalidad propia). Si a esto le sumamos la cantidad de bugs, fallas y los malos gráficos, entonces nos quedamos con una sensación de oportunidad desaprovechada.

Ojalá con el tiempo podamos recibir actualizaciones de mejoras y contenido para tratar de cambiar la opinión que ha generado Redfall entre los fans, mientras tanto, es recomendable que si tienen Xbox Game Pass le den una “oportunidad”, pero de otra forma, es creo es mejor esperar a un producto más pulido.