POSTAL 4: No Regerts | Reseña

La única manera en que se me ocurre describir a POSTAL 4: No Regerts es como un Grand Theft Auto sin autos y con diseño en plan de no aburrir a nadie, pero se podría decir que este ya es así, la cosa en el título en cuestión es que desde los controles hasta las acciones de nuestro protagonista es que todas están hechas para destruir y meterse en problemas con la ley pero con un diseño audiovisual bastante pobre que nos remontará a Goat Simulator en cualquiera de sus versiones.

POSTAL 4 nos lleva a una ciudad muy pequeña donde nos querremos hacer otra cosa más que destruir todo lo que esté en nuestro camino, y meternos con los habitantes para herirlos y después darnos un tiro con la autoridad para ser atacado sin descanso por toda la cantidad de policías posibles, hasta encontrarnos detenidos o muertos, más veces muertos honestamente. Las misiones que se nos encargan son a veces difíciles de realizar por dos cuestiones importantes: el mal diseño del HUB y lo complicado de hacer las cosas por cuestiones precisamente de programación, ya sea para agarrar objetos o para encontrarlos en un mapa que también no está tan detallado. Mi experiencia en este título no puede asemejarse a nada relacionado con “placentera” sino más bien desesperante, aburrida y hasta fastidiosa en momentos.

Incluso el propio diseño del juego no nos permitirá tomarnos en serio ninguna actividad ya que repito, es tan parecido a Goat Simulator en las mecánicas y físicas, que desearán solo deambular matando gente o causando destrozos a la ciudad. En mi caso particular pasaron pocos minutos antes de que olvidara los controles y la manera en armarnos y desarmarnos para regresar a las andadas de la delincuencia dentro del juego, así que de verdad no se lo tomen tan en serio y nomás busquen de ser posible, desbloquear la lista de trofeos que también no está hecha para llevar un orden establecido, o quizá sí pero de nuevo todo es para tomárselo muy a la ligera.

Ya describí que lo visual y mecánico es básicamente un Goat Simulator con muchos ragdolls y físicas que nomás no motivan a terminarse el juego de manera correcta, todo nos moverá a no hacer nada en serio y eso provoca desatención de la línea principal y de lo que supuestamente deberíamos de hacer. Eso aunado a que hay carritos para rentar -o robar que seguramente eso harán- con los que irán atropellando al mundo entero para nuevamente meterse en problemas con la ley y terminar en un estira y afloje con las policía. Incluso esta reseña me está costando trabajo por el hecho de que ni allá ni acá logré concentración y todo porque no pude darle más de cinco minutos a las actividades principales, así como acá, que tratar de explicarles una característica del juego me provoca querer hablar de la mala experiencia que tuve con el juego.

Mi intención no es tirarle basura a POSTAL 4: No Regerts nomás porque sí, pues de verdad intenté dejarme llevar por la historia pero me pareció tan aburrida que mejor decidí buscar cosas diferentes para hacer, como robar dinero de cajeros, golpear gente, destruir objetos y luego conseguirme una pistola para no perecer tan rápido cuando me metiera en problemas, y eso hice y no me resultó tan mal pues fue el único momento real en que me divertí gracias a la persecución y adrenalina, misma que se fue diluyendo rápidamente gracias al mal diseño de los controles para empuñar el arma y disparar, y ni se diga el mal diseño de la mira con la que apuntamos pues será muy complicado lograr un tiro certero para deshacernos de cualquier poli que se nos ponga enfrente, y ellos sí tienen buen tino, tanto que no la hubieran armado como Stormtroopers.

VEREDICTO

Siendo muy honesto no tengo mucho bueno de qué hablar respecto a POSTAL 4 y no porque le tenga odio pues de verdad intenté divertirme con el juego lo más que pude, hice varias cosas que se me pedían y también anduve rondando por las poblaciones aledañas tratando de explorar el mapa y viendo que más podía hacer, pero la verdad entre que el diseño es bastante flojo, los controles poquito más y con el HUB tan malo, es que terminé por rendirme y no intentar absolutamente nada más, y solo llegué a la conclusión de que lo mejor era borrarlo de mi SSD del PlayStation 5 para liberar espacio que no necesitaba, pero sí quería tener disponible.

POSTAL 4: No Regerts ya está disponible en PlayStation 5 y PlayStation 4; además lo pueden encontrar en PC por medio de Steam.

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