Sokobos | Reseña

El juego entre más sencillo y mejor pensado, me gusta más. La calidad que mostró Thomas Was Alone fue soberbia y sin igual, a la fecha sigue siendo uno de mis puzzles favoritos con simple fondo negro y cuadros de colores que al final dejaban una tremenda enseñanza. Por eso es que al ver uno del mismo género con sencilla presentación no me detengo y le doy una oportunidad para convencerme, por lo que Sokobos no se iba a perder en el olvido.

Fondo negro con escenarios delineados y colores uniformes, columnas griegas o cuadros con figuras representativas de algo relacionado con la cultura griega de antaño, y una especie de guerrero hecho de la manera más sencilla es todo lo que veremos en Sokobos, la misión es encontrar la manera de colocar todas las piezas en su lugar en la menor cantidad de movimientos, que en realidad no es algo imperativo pues con tal de hallar la solución ya estaremos del otro lado. Sokobos se basa en movimientos sencillos y la habilidad de trasladar un solo objeto siempre y cuando no lo estorbe otro, no podrán saltar ni usar poderes místicos ni así, solo con mover los objetos y ponerlos en su lugar ya la armaron, y lo mejor de todo es que la dificultad no crece de manera que lleguen a algo imposible, por lo que sí tendrán algunos descansos, con la ventaja de que si no pueden con un nivel entonces se lo saltan y continúan con el siguiente sin restricciones, está acción no afecta en nada para lo que viene, solo que no será tan fácil entender algunas mecánicas de juego como colorear las columnas y ponerlas en donde la verde va, o la roja o la amarilla pues hay niveles de ese tipo.

Sokobos es súper amigable pues nos da la posibilidad de regresar pasos en caso de habernos equivocado al igual que al contador de los mismos, por los que los errores aquí no son castigados, eso es una chulada pues no nos victimizan de ninguna manera por algún errorcillo inocente. Sokobos cuenta con 60 niveles y 8 logros, estos últimos concentrados en terminar simplemente los rompecabezas y uno de pasar 2 horas jugándolo, lo cual no es nada difícil ya que a decir verdad por más sencillo que lo vean, la dificultad y la complejidad de los puzzles generan ganas de atacarlos pues las penalizaciones aquí no caben, y eso ayuda a llevar una jugada bastante tranquila que bien podría servir para salir del estrés con 10 minutos que le dediquen en intentar resolver un nivel, que no deberían tardar más de eso pues Sokobos no se concentra en destruir la calma del usuario.

VEREDICTO

Con su formato en ventana permite echar un nivel mientras contestan correos o con la ventaja de que el jefe no los vea, y su sencillez en los menús nos da la posibilidad de no tardar tanto en cargarlo y empezar a darle caña, por lo que las ventajas de Sokobos (disponible en Steam) son múltiples y no hay realmente un pretexto para no darle la oportunidad de probarlo. Es divertido, fácil, y nos permite equivocarnos tantas veces queramos sin hacernos sentir mal, haciéndolo altamente recomendable.

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