Goat Simulator 3 | Reseña

No voy a mentir por convivir pero tampoco voy a negar los hechos: sí tengo el platino de Goat Simulator, el primero de ellos y todo porque la oferta era como de 1 dólar, así que dejar pasar un platino por ese precio habría sido herejía. Jamás fue un juego que me pareciera épico ni nada por el estilo, pero meh, al menos no me aburrí.

Goat Simulator 3 es un juego donde seremos una cabra caminando por el monte, la ciudad, entre la gente y todo lo que el mapa nos ofrece, en realidad no es que hagamos algo típico de cabra pues la idea es hacer lo que nos plaza con tal de conseguir logros que nos van poniendo, unos más complicados que otros y algunos incluso con bugs por ahí pero que esperemos no tarden en arreglar. Goat Simulator 3 no es una mejora a los anteriores, pues tanto las físicas como los gráficos se mantienen prácticamente igual, lo que nos da a entender que solo hubo un cambio en el mapa, las actividades, los menús y los objetos con los que podemos vestir a la cabra. Nada muy sustancial pero bueno, este juego ha conseguido ser exitoso por razones que escapan a mi vista, o quizá porque atrae el simple hecho de no hacer nada como humano. Aún no lo deduzco.

Goat Simulator 3 tiene la ventaja de poder jugarse en pantalla dividida hasta ser un total de cuatro cabras, no tengo idea si antes era posible esto pero no recuerdo haberlo intentado, en esta ocasión lo hice y me pareció buena idea debido a las actividades que se pueden hacer en multijugador, lo cual imprime un plus para aquellos que queremos experimentar algo un poquito diferente, ya que los minijuegos son entretenidos, nada fuera de este mundo. Pero hey, les puede servir para acercar a su pareja a jugar con ustedes. Si es que tienen.

En Goat Simulator 3 las actividades realmente no pasan de golpear gente, destrozar autos, destrozar la ciudad, destrozar gasolineras, destrozar casas, básicamente destrozar todo con su golpe con la cabeza o las patas, así que para lograr puntos y comprarse ropa para su cabra, será necesario que hagan las actividades sugeridas por el juego, por desgracia algunas están bloqueadas por esos bugs, pero nada que no permita continuar con todas las demás tareas dentro del juego.

Hay que destacar que Goat Simulator 3 no es un juego realista, los gráficos son reducidos en calidad, las físicas, los movimientos de cualquier personaje así como las explosiones y la destrucción del entorno no son reales, mucho menos el comportamiento de los humanos dentro del juego, por lo que no esperen un título revolucionario o que esté nominado a juego del año, simplemente es un producto que nos hará sentirnos diferentes más allá de un dios de la guerra, un conductor de carreras, un soldado en plena guerra o cualquier otra cosa, es solo una cabra caminando y metiéndose en problemas por el simple hecho de que puede. Aunque sí pudieran arrestarlos, y es muy divertido.

VEREDICTO

Fanáticos de la acción, disparos, persecuciones o eventos apocalípticos: Goat Simulator 3 no es para ustedes.
Goat Simulator 3 es solo para los que quieren cambiar el chip y decidir hacer tonterías o travesuras que no pudieran hacer en su vida diaria, es como un Grand Theft Auto pero con cabras, pues casi que se puede hacer lo mismo pero con un alto grado de violencia, ya que es súper sencillo escapar de la autoridad si aquí hacemos un relajito como lo haríamos en GTA.

Fuera de la libertad que uno tiene, Goat Simulator 3 tiene lo suficiente para divertirse de manera muuuuuuy diferente a lo que un servidor ha estado jugando, pues entre Kratos, FIFA, NHL, Gran Turismo y Call of Duty, ser una cabra no es tan mala idea.
Goat Simulator 3, desarrollado por Coffee Stain North, está ya disponible para PlayStation 4, Xbox One, PlayStation 5, Xbox Series X|S y PC.

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