West of Dead | Reseña

El editor Raw Fury y el estudio de desarrollo Upstream Arcade traen un western roguelike ambientado en 1888, con elementos de ultratumba en el purgatorio, y disparos estilo “twin stick” de vista superior a PC en Steam, PlayStation 4, Xbox One y Switch. West of Dead es una aventura que detrás de su llamativo apartado visual, esconde una jugabilidad hardcore que los pondrá en más de un aprieto.

VAN A MORIR, ASÍ, MUCHO

En West of Dead protagonizamos a un pistolero llamado William Mason, interpretado en actuación de voz por el siempre carismático actor Ron Perlman (el único y verdadero Hellboy del cine); con este personaje tendremos que superar y sobrevivir a un mundo de creación procedural ambientado en el purgatorio en 1888, lugar donde nos toparemos con una serie de criaturas y forajidos de ultratumba de todas las formas y tamaños, quienes nos harán la vida de cuadritos, pues porque, este no es simplemente un juego de acción, es un roguelike twin stick shooter con un poco de timing y mucha cobertura.

Así como lo leyeron, West of Dead es principalmente un shooter twin stick, es decir, dos análogos, con uno se mueven, y con el otro apuntan en una vista superior en la mayoría de los casos; pero alejándose de ser un intenso shooter de tiroteos, el juego se concentra en un método de cobertura casi automática y muy sencilla, y de uso de armas de fuego, con en los últimos casos extremos, un uso de ataques melee.

Nuestras armas cargan de forma automática, así que sólo debemos concentrarnos en apuntar bien, lo cual a veces puede ser complejo, dado que los enemigos se mueven bastante en la mayoría de los casos. Al tratarse de un gameplay del tipo hardcore survival, por ende los enemigos nos bajan mucha vida, incluso nos pueden matar de un par de golpes o menos, y nosotros… bueno, no somos tan poderosos en el inicio. Así que deben estar preparados para morir muchas, muchas veces.

LA CAUTELA ES IDEAL

West of Dead mantiene una jugabilidad basada en la cobertura, en lugares que también pueden ser destruidos, así que nos fuerzan a estar en constante movimiento; también las cargas automáticas, que son lentas, nos obligan a tratar de disparar con el mayor acierto y puntería, pues nuestros ataques pueden ser lentos, y los enemigos normalmente son en mayor número. Por fortuna haciendo juego con el estilo visual en altos contrastes, podemos encender luces que por un instante ciegan al enemigo dándonos así tiempo para atacar.

Igualmente hay que mencionar que en la serie de cuartos procedurales, tendremos sitios especiales para lograr mejoras y obtener ciertas habilidades, así como equipar mejores armas de mayor alcance, más poder, carga más rápida etc; la mala noticia es que si nos matan comenzamos de cero desde el inicio. Así que si buscan una aventura demandante y de avance paulatino y muy peligroso, este sin duda es su juego ideal; por el contrario, si lo que quieren es algo de disparos rápidos y explosiones por doquier, más vale lo piensen dos veces.

VISUALMENTE LLAMATIVO

Sin duda gráficamente y en el lado artístico, West of Dead es un ganador; sus gráficos son bastante detallados, aunque tarde o temprano sus habitaciones o calabozos tendrán parecido entre sí. El estilo de cómic en el juego, por ejemplo muy parecido al visto en los cómics de Hellboy con arte de Mike Mignola, es otro punto a favor, y un elemento que brinda de mucha personalidad al juego, más con una banda sonora estilo western y una perfecta actuación de voz por Ron Perlman. Asimismo los efectos sonoros son contundentes para sus armas, lo que en términos generales, deja muy buena impresión en el jugador.

SI QUIEREN UN RETO

West of Dead es muy directo en lo que ofrece, ya que desde inicio se siente su curva de dificultad, algo que agradecerán los gamers con ganas de algo demandante y enemigos peligrosos; su jugabilidad por decir, estratégica de cobertura y tiroteos lo hacen ideal para quienes buscan un shooter de estilo táctico en tiempo real, donde gracias al diseño procedural, cada cuarto y sesión de juego será original. A esto se añade el gran valor artístico y un gameplay fluido, así como un sistema de audio bastante inmersivo, lo que entrega una aventura que seguro les harán pasar buenos momentos. Sólo recuerden, van a caer muchas veces.

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