V-Rally 4 | Reseña

Desarrollado por Kylotonn Racing Games (TT Isle of Man, WRC 7) y publicado por Bigben Interactive, V-Rally 4 es la nueva entrega de una icónica serie de juegos comenzada en 1997 y que tuvo su tercera parte en 2002. Sí, hace dieciséis años. Por lo mismo no es de extrañar que muchos fanáticos de las carreras y los juegos de rally hayamos esperado con ansias esta secuela a cargo de un nuevo estudio.

SINTIÉNDOSE COMO EN CASA

Desde el primer momento de tener en mis manos V-Rally 4 y al momento de realizar el manejo de prueba que nos brinda el título para acomodar las ayudas de manejo esta nueva entrega transmite un control y físicas que si son fans de la saga no les tomará por sorpresa su “dificultad”. Aquí es muy importante aclarar que la base del control y físicas son del tipo arcade, por lo que no estamos ante un real simulador, más bien un juego que guarda elementos de realismo, por ejemplo en el peso del auto y reacción en el terreno, pero todo llevado a un manejo no tan demandante o preciso, dejándonos ir a velocidades un poco más altas de lo normal. Aún así y que sea arcade no significa que la dificultad dentro de este término no se haga presente.

La franquicia de V-Rally, originalmente llamada “Need for Speed: V-Rally” (rival de los primeros Colin McRae Rally) siempre ha sido conocida por su dificultad arcade y sus pistas o tramos vivos, y que brindan una emoción en el manejo gracias a sus diseños en terreno, así que no es de extrañar que este V-Rally 4 mantenga ese espíritu de “locura al volante”, elemento que es de agradecer dado que la cuarta entrega es producto de un estudio diferente y que además de saber mantener este factor, ha añadido otros de actualidad como son las carreras de buggies, hill climb, downhill, de rallycross y elementos de desarrollo de equipo como el poder contratar mecánicos, mejorar el auto, etc.

¿ES NETA?

Si por alguna razón no conocen la expresión, lo que quiero decir es ¿Es verdad?, una pregunta que me he hecho por algunos días mientras disfrutaba de V-Rally 4 y que mantenía en la mente al leer o ver comentarios ya sea en páginas o en YouTube en las que califican de “pobre” a este juego arcade, acusándolo de tener malas físicas, escenarios aburridos, gráficos mal logrados, un sonido de baja calidad, un modo de carrera aburrido y lo peor, una dificultad demasiado difícil. Detalles que la verdad no he podido ver de la misma manera, pues no sé si es porque conozco la franquicia, o simplemente porque mis ojos y mis sentidos me dicen que esta gente ha jugado otro juego, o no lo ha sabido comprender, o yo qué sé. La cosa es que tengo esta incógnita y nomás no entiendo.

Para comenzar V-Rally 4 vuelvo a decir, es un juego arcade, por lo mismo es más libre de tener físicas no tan realistas y que ayudan a final de cuenta a un manejo más desenfadado hablando de la velocidad o los riesgos que podemos tomar en carrera. Aclaro, que sea arcade no significa que no sintamos el terreno, cosa que está muy bien lograda en el juego.

Si manejamos en tierra y salimos de golpe a pavimento, el control, el sonido y la animación del auto nos muestran el cambio de tracción. Es decir, salimos derrapando y al entrar a carretera el auto se “agarra” al suelo cuando las ruedas están ya libres de escombros. Lo mismo pasa si conducimos en lodo y pasamos a tierra, o cruzamos un charco de agua, la cual nos hace bajar la velocidad (no nos hace patinar como en un DiRT Rally porque NO es un simulador), es decir, y repito, se siente el cambio de manejo dependiendo del terreno.

Lo mismo pasa si nos subimos a rocas en el borde del camino, o pasamos sobre arbustos, o literalmente chocamos con un árbol; el auto puede volcar, derrapar, perder agarre o hacer una pirueta dependiendo de la velocidad, el peso del vehículo y la inclinación del suelo. Dicho esto recuerdo que por ahí hay un video donde se muestra un auto subir al borde de un circuito para posteriormente salir disparado al aire… ok, pensando que el juego tiene una inclinación arcade, eso puede pasar si buscamos que pase. Sólo digo.

Y SEGUIMOS CON LO “ABURRIDO”

Sí, el nivel de dificultad en la IA es alto, pero el juego tiene una barra que podemos mover para que no sea tan difícil, esto reduce nuestras ganancias en campeonatos, pero la opción está ahí. Si se les complica, pueden moverla. Igualmente y hablando del modo de campeonato, allí ganaremos dinero, y con ese dinero contrataremos mecánicos para el equipo, obviamente mientras mejor calificado sea el personal, más cobrará, pero esto nos llevará a mejoras sustanciales en el aspecto técnico del auto lo cual brinda inmersión pues nuestro auto de campeonato no será igual al del visto en el modo de carrera rápida, así que si gustan, también pueden escogerlo y entrar a este modo. Para terminar los autos también se pueden mejorar visualmente, con cambios en la carrocería, color y pegatinas.

En el diseño de arte encontramos una lista de recorridos para rally convencional, rallycross, hill climb (downhill en inverso) y circuitos para buggies y camionetas todo terreno; en todos ellos el apartado de construcción de escenarios es muy bueno, las pistas a mi parecer tiene bases o están inspiradas en SEGA Rally, con circuitos y tramos llenos de color, con muchos detalles como campos de flores, acantilados, lagunas, playas, túneles, cuevas, zonas llenas de lodo, cascadas en el horizonte, brillantes atardeceres, selvas, lugares desérticos, zonas urbanas con callejuelas, sitios nevados o cubiertos de hielo y más. Y lo mejor de todo es que si nos aburrimos de los tramos ya existentes, podemos crear uno de forma aleatoria para escoger posteriormente la dificultad y hora del día con su respectivo tipo de clima.

Hablando de la calidad gráfica de V-Rally 4, el juego no es un ejemplar de lo más alto técnicamente, los autos tienen un modelado decente y algo simple en sus interiores, las texturas en la gran mayoría tienen mucha definición y detalle, a excepción de algunos árboles (ya saben, el talón de Aquiles en los juegos de carreras); los efectos de iluminación son muy buenos, con rayos y destellos en los atardeceres, charcos y zonas de agua que dan vivacidad a los escenarios, y unos reflejos en los autos casi “recién salido de agencia” lo cual queda en el pasado cuando ensuciamos todo con lodo, tierra, etc. En el aspecto de daños visuales no podemos hacer pedazos nuestro auto, pero la carrocería se abolla y deforma de una manera muy realista y de forma significativa, cosa que no podemos decir de otros juegos.

El apartado sonoro también es bueno, pues cada auto suena diferente, podemos distinguir entre los cambios de marcha y el trabajo del motor, también el sonido de las llantas dependiendo del terreno, y para escenarios encontramos sonidos obviamente para el entorno, como son los ambientales (cascadas, animales, pájaros) y hasta de grupos de personas y fanáticos que vitorean y gritan cuando pasamos a toda velocidad.

EL PUNTO MALO

V-Rally 4 es una buena entrega que ha sabido mantener sus bases ya clásicas, pero personalmente el apartado de hill climb es el más sin chiste, está puesto casi como para cumplir dejando otro elemento u modo de juego, y no destaca en comparación de los otros. Asimismo el número de autos es reducido (un poco más de 50) así que esperemos lleguen futuras actualizaciones. Y finalmente el llamado Extreme-Khana, o el modo donde hacemos derrapes y esquivamos conos, es algo aburrido al largo plazo, aunque probar los vehículos en este escenario es divertido por las físicas del carro (cuando dejamos aparte si queremos ganar o no, puntos de derrapes, etc). Y para terminar, aunque las gráficas son buenas, de pronto hay un sentimiento de que diferentes elementos pudieron ser mejor trabajados, lo cual por fortuna es compensado con el diseño de arte.

FANS DE V-RALLY

Si son fans de la saga y ya tenían tiempo deseando ver su regreso, entonces sin duda deben darle una checada a V-Rally 4, presenta el mismo tipo de diversión y dificultad, pero ha añadido nuevos elementos, lo cual lo hacen una buena apuesta para las opciones de juegos que tenemos hoy en día. Si por el contrario no conocen V-Rally, seguro descubrirán un sentimiento de aire fresco, tal y como se percibe cuando cada mil años aparece un SEGA Rally y nos hace dibujar una alegría en nuestros rostros.

Sí, V-Rally 4 no es perfecto, pero siento que tampoco se debe enterrar un juego por fallas que a otros títulos se les dejan pasar. Todos sabemos de los sobrevalorados e infravalorados de cada generación, así que al final del día, los gamers somos los que sabremos si ha valido la pena un título o no. Pero para eso hay que jugarlo. Yo personalmente, estoy feliz con este título, y espero que además de tener más contenido, en un futuro haya una quinta entrega que pula las carencias de esta.

Compartir en: