Anamorphine | Reseña

Artifact 5 es un pequeño estudio ubicado en Canadá, precisamente en Montreal desde donde desarrollaron Anamorphine, un relato en forma de videojuego en el cual no se puede hacer nada, más que tratar de entender el nudo, y también el nudo de garganta que provocan varios de sus pasajes.

SHOOTER DE JOYSTICK DOBLE

Anamorphine se maneja bien sencillo, solo tendrán que usar los joysticks para moverse y para girar, con esto harán todo lo necesario para acabar el juego conforme la historia se va contando, y podría considerarse que es un shooter porque las palancas “disparan” acciones que llevarán a otras escenas o mostrarán cinemáticas que complementan el relato. Qué tal les quedó el ojo con mi definición? “Shooter de joystick doble”. Pésimo ahora que lo pienso pero es que Anamorphine es eso, va desencadenando acciones conforme caminamos por las escenas y ya, olvidándose del resto de los botones del Dualshock 4 -me molestó horrores no poder controlar la velocidad de movimiento-, lo que pudiera ser desesperante para aquel que no desea una aventura de descripción, con la que sentiremos a nuestro corazón palpitar con cierto dolor.

Anamorphine centra la historia en los recuerdos de una pareja que vive cómodamente en un departamento muy agradable, donde la luz es casi por definición la mujer quien presume una melena hermosa en color azul y en veces color rosa, pero siempre iluminada lo cual nos da más o menos la idea de cómo la veía el protagonista, su esposo. Conforme caminamos y observamos todo lo que está a nuestro alrededor, veremos como esta bella y cálida relación se va destruyendo por un evento desafortunado donde ella muere. Lo único que queda son malas pasadas de la mente de nuestro personaje, donde veremos construcciones horribles de su amada y de los instrumentos con los que tontamente está acabando con su bienestar y la poca cordura que le queda.

MALAS PASADAS DE LA MENTE

Anamorphine no presume de gráficos impresionantes, característica poco valorada por un servidor, pero sí aprecio un buen desempeño en todos los escenarios, mismos que por su elevada cantidad de polígonos y quizá una mala programación o distribución de los mismos, termina por tirar significativamente los FPS haciendo que todo vaya muy lento, contando también como un gran defecto la mala elección del cambio en escenarios, por lo que será fácil encontrarse con pantallas de carga cuando ya estábamos listos para seguir caminando. El peor error que atravesé en la experiencia, fue la de ver cerrado por completo el juego para visualizar el menú de PlayStation con lo que debo ser honesto, me fastidié muchísimo y me obligó a cambiar de juego para olvidar el trago amargo.

Sin embargo no todo es tan malo, y digo “tan malo” porque la idea como tal es muy buena a pesar de omitir por completo la interacción con todos y cada uno de los objetos en el juego, con lo que la aventura está limitada a solo explorar, ver y escuchar la magnífica banda sonora que está basada en el cello, mismo que está interpretado de manera verdaderamente memorable. Es quizá la música el punto más fuerte en esta triste y depresiva historia.

VEREDICTO

Anamorphine es un juego muy breve que fácilmente se acaba en unas horas si es que los glitches nos lo permiten. En nuestro caso tardamos bastante en poder ver más capítulos por estos mismos fallos que confiamos sean arreglados a la brevedad, pues no nos gustaría perdernos el resto de la odisea que tiene dos vertientes, mismas que se relacionan con la sencilla lista de trofeos carente de Platino.

Anamorphine deja entretanto un buen aprendizaje, y presenta una cruda realidad que viven actualmente millones de personas en el mundo. La depresión. El escenario representa el sufrimiento de alguien que padece una fuerte depresión por la perdida del ser amado, de tal magnitud que recurre a la auto destrucción. Abordar este tema no es cualquier cosa, por lo que aquí en Kopodo los exhortamos -así como otras veces- para que tanto nuestros seguidores, así como amigos y enemigos, no duden en buscar ayuda profesional ya sea para ustedes o para alguien que este viviendo esta difícil experiencia. Los alentamos a que auxilien lo más pronto posible a quienes conozcan en esta situación, ya que desgraciadamente no sabemos cómo estas situaciones pueden perjudicar a los afectados, de manera que tomen decisiones que puedan ser irreparables. Ya sea, si son ustedes los que están viviendo este padecimiento en carne propia o no, es importante remarcar que buscar la ayuda de un especialista no es señal de debilidad, sino una muestra absoluta de DESEO, deseo de salir adelante, deseo de encontrar su fortaleza perdida y deseo de querer VIVIR.

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