Ryan Reynolds es Hal Jordan, un piloto militar que se convierte en súper héroe gracias a un anillo.

Martin Campbell también conocido por dirigir cintas como The Mask of Zorro, 007 GoldenEye, y Casino Royale ahora presenta una historia sobre… hum… muchos efectos especiales y la incansable lucha del color verde vs amarillo.

Antes que alguien se pueda ofender con el pasado comentario, no, no me he burlado de la película, de hecho creo que no hace falta pues el solo verla es tarea suficiente para encontrar la idea que en verdad hay cosas que no deberían llegar al cine.

¿Qué tiene de malo Green Lantern? Creo que nada, si tienes doce años (o menos) y puedes resistir personajes “tontos” y más observando la gran cantidad de adaptaciones de súper héroes que hemos visto en estos últimos años, Spider-Man, Los 4 Fantásticos, Hulk, Batman, El Capitán América, Thor, Iron-Man y otros han tenido la culpa de mostrar al público cuando una cinta adaptada de comic puede llegar a ser buena, muy buena, para pasar el rato, o simplemente un bodrio que no debió existir. ¿Cuál es el lugar de la cinta en cuestión? Eso es tarea de cada quien.

Si hay un punto a favor este sería el uso de efectos visuales en muchos momentos, Oa, el planeta de los Lantern, así como las criaturas y demás “pretextos” son mostrados con cierta espectacularidad al menos para dejarse enganchar por un rato; luego vienen las malas actuaciones, algo que hablando de una cinta de esta índole se podría decir “no son de mucho requisito” sin embargo es claro decir que como mínimo los protagonistas deben estar unidos con las imágenes digitales para mostrar emociones que hagan creíbles ciertos sucesos, asunto que rápidamente cae en evidencia cuando vemos a Ryan Reynolds comportarse de “forma extraña” cuando está en el mundo de Oa, haciendo que uno sienta que el actor no reacciona como si en verdad estuviese allí, claro eso por dar un ejemplo, porque la cinta está saturada de ellos.

Para mala fortuna lo malo no termina allí, vemos como una historia que fácilmente pudo ser verdaderamente épica por todos sus elementos se convierte en un “chiste” donde “el malo” es malo por ser envidioso, por ser el típico personaje que siempre ha deseado la vida del afortunado (Hal Jordan), es decir, la chica, la fama, la galantería y la obvia y despreocupada forma de ver las cosas por notar que casi se resuelven por fortuna.

En pocas palabras, Green Lantern es entretenida hasta su final, sin embargo tiene muchos momentos que simplemente no son creíbles por sus actuaciones, los efectos visuales son buenos pero no ayudan en lo mínimo a marcar una historia trascendental, lo cual era lo que en muchos trailers se deseaba mostrar (ya saben todos con un tono serio y lleno de dramatismo). Personalmente si se es un fan de las cintas de súper héroes supongo querrás ver dicha película, claro, esto no significa que te agrade o que la tengas dentro de las favoritas.