Batman Dark Knight (parte 2)

Reflexión sobre uno de los personajes de cómic que más ha evolucionado en el mundo del cine, el hombre murciélago.

Un callejón oscuro en medio del silencio más abrumador. Una pareja que pasea después de salir de un teatro… El tiempo indicado, el tiempo de morir, el tiempo de resurgir, de caer en un abismo donde la búsqueda de justicia y el dolor lo perseguirán por siempre como si de una ley inmortal sobre su persona se tratase ¿Qué hacer? Sueños destruidos por un evento mortal. Los padres de Bruce Wayne cayeron a sus pies ¿Por qué? ¿Por odio? ¿Por maldad? ¿Por casualidad? Si… Quizá por eso, pero sobre todo por la enfermiza situación que se propagaba por Ciudad Gótica; El hambre y la desesperación conducían a las acciones más terribles. Bruce Wayne desde muy chico aprendió una lección mortal. La de la naturaleza humana que resalta cuando no hay un orden justo.

Al inicio fue el mal quien lo controlo. La venganza sobre la muerte de sus padres. La ira incontrolable de haber perdido todo en solo un segundo; el entrenamiento de su cuerpo y mente. Después él maduró, y entendió que el mundo no es blanco y negro. El mundo es gris y todos somos parte de él. Se dio cuenta de que algunos tratamos de hacerlo mejor, y otros no. Decidió que a ellos era a quienes tenía que vigilar desde las sombras. Para que nadie sufriera como él sufrió. Para ayudar a Ciudad Gótica, y en el transcurso tratar de ayudarse a sí mismo.

Así nació Batman, que entre la tragedia, la oscuridad y la soledad nunca descansará por esas cadenas que le arrastran a cumplir con su deber.

Pero toda acción crea una reacción… Y de ella, del nacimiento de este hombre murciélago, surgieron nuevas ideas extremas de pensamiento. Anarquía, locura, caos… El nombre que sin duda nos viene a todos a la mente es el de Joker o “Guasón” uno de los peores enemigos de Batman, quien en esta última película (El caballero de la noche) nos muestra con majestuosidad (en parte gracias a la interpretación de Heath Ledger) que aún las almas más benevolentes como la de Harvey Dent “Dos caras” pueden ser corrompidas de tal forma que incluso la única salvación es la muerte. Una vez más en esta secuela de “Batman inicia” el personaje principal tiene un desarrollo en el que sobre todo aprende una nueva lección, la cual nos muestra que el haberse convertido en un símbolo no solo da paso a la defensa del bien, si no a la respuesta que sus protegidos esperan de él hacia cualquier situación. Batman se convierte en el engrane por el cual todo puede seguir funcionando. Aún mientras en el proceso tenga que ser destruido hasta perderlo todo. Sin duda la tarea de un superhéroe.

Una eterna lucha entre dos fuerzas que jamás dejarán de existir, pero más que eso, un aprendizaje continuo sobre ese mundo que en ocasiones no es tan distinto al nuestro. Y que a cada segundo evoluciona ante nuestros ojos.

Es por eso a mí parecer, que Batman es uno de los personajes que han cambiado tanto con el pasar de los años. Crecimos con la cultura del cómic, con las imágenes desplegadas ante nuestras vistas de ese Caballero de la noche, y estoy seguro que más de uno siempre pensó hacer o deshacer algo que no nos gustaba sobre dicho personaje. Es ahora el tiempo en el que los nuevos fans están mostrando y recreando una verdadera y actualizada esencia del hombre murciélago. Y claro, con esto no quiero decir que las anteriores películas de Batman fueran de menor merito, pero hay que pensar que después de tantos años no solo nos están mostrando visiones heroicas y balazos, si no también historias complejas y desarrollo de personajes donde es tal la fuerza de estos, que incluso sin mascaras y disfraces funcionarían perfectamente en cualquier película. Batman es un ejemplo de cómo un personaje de cómic ha madurado al pasar de los años junto con la sociedad, en donde ya no se pide lo mismo que antes, en donde ya no es “ridículo” entre los adultos ir a ver una película donde se enfrentan superhéroes y súper villanos con trajes extravagantes en medio de escenas repletas de un dramatismo sobrepasado solo por sus acciones.

La película me parece excelente, pienso que todavía hay mucho que se puede mostrar acerca de los personajes que se enfrentan en Ciudad Gótica dentro de las sombras y debajo de los a veces esperanzadores murmullos de sus habitantes. Solo es cuestión de tiempo para que esas historias plasmadas en papel salten a la vista de los espectadores en las salas de cine, para que todos podamos ver “en acción viva” las hazañas del Caballero de la noche.

Realmente espero una secuela donde se muestre una nueva faceta de Bruce Wayne y Batman, pues en esta película nos mostraron el descubrimiento de la utilidad de Batman en Ciudad Gótica como la respuesta a lo que sus habitantes necesitan, también nos dieron el ejemplo de cuanta libertad se puede tomar para asegurar la de otros. Sobre todo nos mostraron un Joker como nunca lo habíamos visto en el cine, un personaje capaz de cambiar la suerte de muchos a través de un aparente caos absoluto, alguien con la fuerza suficiente para trastornar la visión del más noble, alguien que le mostró a Batman que en cierto modo, solo es un “freak” como él.

Ahora nos queda saber que en ese afán de justicia y cuidado total, Batman no rebase esa línea moral que hace que los habitantes de Ciudad Gótica sean libres y se transforme en lo que enfrenta todas las noches, ya que “… O mueres siendo un héroe, o vives lo suficiente para convertirte en un villano”

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